En el "Enfoque internacional", enfocamos reflectores sobre un tema de la actualidad mundial para analizarlo en profundidad, con entrevistas a expertos y actores del sector político y social.
A unas horas de la toma de posesión de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos, la frontera con México luce una tensa calma y a sólo unos pasos de la puerta de entrada, los choferes de caravanas ofrecen sus traslados a diferentes partes de Arizona, en lo que parece domingo cualquiera.
Informe desde Nogales, ciudad fronteriza entre México y Estados Unidos
En la frontera de Nogales, las actividades no pueden detenerse. “Tucson, Phoenix; ¿Va para Tucson? Ya me voy, pásele a Tucson, ¿Viaja a Tucson?”, grita un chofer en el puesto fronterizo.
El sonido del tren de carga, anuncia su paso por la garita y es, justamente ahí, al lado de las vías del tren, donde son deportados los inmigrantes ilegales que son sorprendidos en Arizona, estado que comparte 568 kilómetros con México y que fuera parte de la nación azteca hasta 1853.
En el 2024, Nogales (Sonora) fue el municipio de México que recibió el mayor número de personas repatriadas o deportadas, con 48.960, según datos oficiales.
Fernando López Miranda, encargado de una empresa de apartados postales a unos metros de la frontera indicó que no esperan que las eventuales deportaciones afecten la economía local.
“Yo creo que la visión del presidente Trump es una visión de negocio, de dejar dinero; es un empresario, y no creo que afecte a las empresas y desde nuestro punto de vista estamos optimistas, de que las personas que damos el servicio, la verdad es que si estamos optimistas, no estamos nada negativos”, aseguró.
López Miranda vivió de cerca el éxodo de africanos y haitianos que a principios del 2024 colmaron las calles de la pequeña ciudad de Nogales.
“Necesidad de ir al baño, de bañarse, de comer, de darse a entender para poder comprar algo, las necesidades básicas y muchos no hablaban español o inglés, ni nada, que son los idiomas aquí locales y pues si batallaban bastante para sus necesidades básicas”, abundó.
Aunque en los puertos de entrada de Nogales aún no tienen ninguna indicación de deportaciones masivas, los empleados del departamento de seguridad nacional saben que en caso de firmarse una orden ejecutiva tendrán que acatar las órdenes e iniciar con los operativos para localizar, aprehender y deportar a tantos ilegales como sea posible y en el menor tiempo.
Líbano salió de 807 días de limbo presidencial. El comandante del ejército, el general Joseph Aoun, recibió el apoyo de 99 de los 128 diputados que votaron en la Cámara. En entrevista con Radio Francia Internacional, Said Chaya, director del Centro de Estudios de Medio Oriente de la Universidad Austral (Argentina) habla de los desafíos para el nuevo presidente de un país en quiebra que hay que reconstruir en medio de una región en plena ebullición.
El general Aoun tendrá que extender el consenso que hubo en torno a su figura y lograr nombrar un primer ministro de confesión sunita al gusto de todos. La crisis económica, agravada por la ofensiva militar israelí, será otro de los grandes retos para del presidente libanés. La libra libanesa ha alcanzado 89.000 libras por dólar y los colapsos de los servicios públicos han sumido al país del Cedro en una crisis humanitaria.
RFI: ¿Qué hizo que se superaran los escollos de esta elección paralizada durante casi tres años?
Said Chaya: El Líbano que quedó sin presidente en octubre de 2022 es un Líbano muy distinto a este de enero de 2025. En primer lugar, la aparición de la problemática de seguridad fortaleció la posibilidad de la elección de un presidente militar. Por otro lado, la debilidad manifiesta de Hezbolá, que ya estaba en una posición de debilidad, pero después de la guerra en Gaza quedó claro que no estaba en condiciones de imponer ningún tipo de candidato. Luego está el escenario de Siria que termina por sepultar las intenciones de imponer un candidato pro sirio en el país. La situación cambió radicalmente. Y el escenario regional moldea fuertemente las políticas domésticas en el Líbano.
RFI: Tradicionalmente, el presidente en Líbano procede de la comunidad cristiana maronita. Pero, en este caso las luchas de poder internas y las presiones externas bloquearon el proceso electoral. Por un lado, el movimiento político militar chiita Hezbolá en dúo con Amal, el partido chiita más grande en el Parlamento, veían al general Aoun demasiado alineado con Occidente. Por otro lado, Estados Unidos y Arabia Saudita, presionaron en favor de su elección, enviando incluso a sus representantes que llevaron a cabo intensas reuniones con los diferentes bloques parlamentarios. ¿Cuál es el interés de estas dos potencias extranjeras?
Said Chaya: Bien, no nos olvidemos que el Líbano está envuelto en una crisis financiera muy grave. El apoyo de estos dos países es fundamental. En primer lugar, para poder resolver la problemática económica que el país atraviesa, por lo menos, desde el año 2019. En segundo lugar, el hecho de que haya ganado un candidato favorable a la posición estadounidense ayuda a entender que es posible que no se repitan los ataques de Israel como los que vimos contra el territorio libanés. O sea, implica un compromiso por parte de Estados Unidos en esa dirección. Entonces diría, por un lado, el factor de seguridad y por otro, que me parece muy relevante, es el hecho de que se abran varias canillas de tipo económico.
RFI: El general Aoun no sólo recibió el apoyo de Estados Unidos y Arabia Saudita, sino que también catalizó a diversos sectores de la política interna. ¿Quién es este militar sin experiencia política que logró el consenso de tan diversos intereses políticos?
Said Chaya: Es un general relativamente joven, de 60 años, proveniente de una familia de clase trabajadora de Beirut. Por lo tanto, alejado del concepto tradicional de las familias de la élite que suelen ocupar la presidencia del Líbano. Es un tipo con gran experiencia conduciendo las Fuerzas Armadas que en el Líbano son un factor de gran prestigio. Las Fuerzas Armadas son percibidas como un factor de neutralidad, como un espacio seguro. Por lo tanto, Aoun está en una buena posición, mucho más en un momento de debilidad de sus adversarios que querían imponer otro candidato, para poder llevar adelante empresas necesarias en el país. Creo que la primera empresa va a ser generar consenso en torno a un primer ministro de la comunidad sunita que pueda formar gobierno rápidamente y dejar atrás este vacío.
RFI: ¿Qué otros escollos va a encontrar este general sentado en el Palacio de Baabda dentro de un sistema político basado en el confesionalismo?
Said Chaya: Los dos principales desafíos que va a encontrar son, por un lado, la necesidad de una nueva normativa económica, de un ordenamiento económico general del país y, en segundo lugar, balancear en una región que está en plena evolución. Lo hemos visto con las nuevas ambiciones de Turquía, las situaciones que están emergiendo en Siria, la voluntad de Israel de expandir su zona de seguridad claramente expresada en el Líbano, en Siria y, por supuesto, en la tragedia que ha sido Gaza. Y en una comunidad donde Irán ha perdido fuerte protagonismo y Hezbolá se ha debilitado. Además, hay un país que se debe reconstruir después de dos meses de ataques israelíes que han destruido una parte importante de la capital libanesa.
Esta semana se cumplió el primer mes desde la caída del régimen de Bashar al Asad en Siria y también un mes desde que se abrieron las puertas de la temida cárcel de Sednaya, en el norte de Damasco, apodada “el matadero humano”. Nuestra enviada especial Melissa Barra visitó la prisión con un ex preso político, que ahora se dedica a encontrar a los desaparecidos.
Para Hadi Harun, el ruido de la puerta es el ruido más aterrador. Años después sigue atormentándolo. “Cuando abrían esta cerradura, los presos se preparaban para horas de tortura”, dice. A él y a su hermano gemelo los encarcelaron por manifestar en 2O11. Estuvieron en varias prisiones durante ocho años, dos veces en Sednaya.
“Escribía borradores de una Constitución”
“Al principio pensé que nunca saldría de prisión, que me iba a morir ahí. Y luego por momentos empecé a tener esperanza de que iba a salir de ahí y que afuera formaría parte de una nueva Siria. Empecé a imaginar cómo construir un país distinto, a mil años luz de lo que estábamos viviendo, o sea sin la falta de libertades, las cárceles, las vulneraciones, la tortura, etcétera”, cuenta.
“A veces, con otros presos, escribía borradores de una Constitución para Siria en la que cada sirio, sea cual sea su fe, tendría los mismos derechos y deberes. Imaginaba cuál sería el papel de un presidente, un gobierno, un parlamento, qué tipo de contrato social habría cuando cayera el régimen. La mayoría de los prisioneros eran compañeros de lucha, activos en la Revolución. Debatíamos acerca de todo esto en la cárcel”, prosigue Hadi.
Leer tambiénA un mes de la caída de Bashar el Asad, temores y esperanzas de una nueva era
Encontrar a los desaparecidos
Ahora libre, Hadi es responsable de la Asociación de Presos y Desaparecidos de Sednaya. Su propósito es rastrear a los desaparecidos –se cree que hay más de 150.000– y determinar en cuáles de las 12 cárceles sirias estuvieron. Para eso se recopilan pruebas.
“Cuando liberaron la prisión de Sednaya no fue un momento de felicidad. Fue más bien triste. Porque reveló la realidad de las muertes bajo la tortura. Sólo se logró liberar a unos miles de personas el 8 de diciembre. Los desaparecidos podrían ser más de 100.000. Fueron asesinados bajo tortura en Sednaya y en otras cárceles. Lo primero que hicimos fue intentar recopilar los documentos con la lista de los presos y los muertos. Necesitamos saber cuántas personas ingresaron a Sednaya entre 2011 y la liberación, y cuántas salieron, para calcular el número de desaparecidos. Estamos empezando a divisar la magnitud”, explica.
“Desde el primer día, nuestro objetivo ha sido encontrar la forma de proteger lo que hay en las prisiones y otros centros penitenciarios. Proteger los documentos allí almacenados. Es decir, prohibir que el público entre y extraiga estas pruebas. Debe haber una autoridad, ya sea de organizaciones internacionales o del gobierno, que proteja estos documentos. Luego, los documentos deben archivarse digitalmente para establecer la verdad y esclarecer lo que ocurrió con los desaparecidos. Hoy en día nadie lo sabe”, detalla.
Ayuda internacional
Pero el mayor desafío es encontrar los restos. De las decenas de miles de personas encarceladas en Sednaya, sólo 2.000 fueron encontradas vivas el 8 de diciembre. Se siguen encontrando fosas comunes en todo el país.
Gobiernos y organizaciones internacionales han propuesto asesoría a las nuevas autoridades. “Somos una de las organizaciones que más conocimiento tiene sobre las cárceles. Aunque vengan equipos del extranjero, no podrán prescindir de nosotros. Por otro lado, las instituciones y organizaciones internacionales disponen de recursos financieros y técnicos. Para las fosas comunes, por ejemplo, disponen del material necesario para los análisis de sangre y de ADN”, precisa Hadi.
Tras una primera visita el jueves, un investigador de la ONU sobre las violaciones de los derechos humanos durante la guerra civil expresó la esperanza de una "buena cooperación" con las nuevas autoridades. La Comisión de Investigación de la ONU sobre Siria nunca tuvo acceso al país bajo el régimen de Bashar al Asad.
Un mes después de la caída de Bashar al Asad, el gobierno de transición quiere enfocarse en sacar a Siria de la ruina. La cancillería ha pedido a Estados Unidos levantar las sanciones que pesan sobre su economía y que impiden a la población acceder a suministros básicos. Nuestra enviada Melissa Barra estuvo en la ciudad vieja de Damasco, donde los trabajadores esperan que el regreso del turismo relance su economía.
En la ciudad vieja de Damasco, la tienda de artesanías de Mahmud es como una cueva de Ali Baba al pie de la majestuosa Mesquita de los Omeyas, construida en el siglo 8. Sus muros milenarios veían pasar visitantes del mundo entero hasta que el país se cerró con la guerra civil.
Suvenires con la nueva bandera
“El turismo interno existe pero el externo no. Los únicos extranjeros en los últimos 14 años han sido los iraquíes, iraníes y libaneses. Durante años nos ahogaron económicamente. Estaba prohibido usar dólares. Mis tres hermanas se fueron del país”, cuenta Mahmud.
Como todos los vendedores del sector, se dedica ahora a vender suvenires de madera pintados de los colores de la nueva bandera con tres estrellas rojas. “Está hecho en Siria. Cortamos la madera con láser. Los sirios lo compran mucho, gracias a Dios”, precisa.
“Soy optimista”
Al otro lado de la ciudad está la histórica Puerta Bab Tuma, donde ocurrió la primera protesta en Damasco contra Bashar al Asad, en febrero de 2011. La comisaría y los carros de la antigua policía han sido destrozados y dejados a la vista. Los nuevos agentes tienen prohibido hablar con la prensa.
Ahí trabaja Hanni como taxista desde hace seis años. “Antes, Damasco funcionaba con el turismo. Es decir, extranjeros y árabes venían al viejo Damasco. Ahora tengo la esperanza de que renazca”, dice.
“El problema es la gasolina que sigue siendo cara. Bajo el antiguo régimen, nos daban cada 10 o 12 días una tarjeta con 25 litros y la gasolina del mercado negro era cara. Ahora el precio cayó a la mitad. Soy optimista, cuando la gente venga a hacer turismo, la economía mejorará aquí en Siria”, concluye con esperanza.
El funeral del líder histórico de la extrema derecha francesa, Jean-Marie Le Pen, fallecido a los 96 años, tendrá lugar el sábado en La Trinité-sur-Mer, en el oeste de Francia. Pierre-Henri Guignard, exembajador de Francia en Argentina, Panamá y la OEA, evoca la dimensión histórica del padre de la actual líder de la extrema derecha, Marine Le Pen.
"Jean-Marie Le Pen es un personaje que ha marcado la política francesa del último medio siglo. De cierta manera, se empoderó de una forma de oposición al movimiento de Charles de Gaulle, lo que él representaba después de la Segunda Guerra Mundial, en particular su oposición al comunismo. Le Pen permitió, de cierta forma, la emergencia de una corriente nacionalista, proteccionista y radical", dice Pierre-Henri Guignard.
Ese cóctel tenía una implicación concreta en el discurso de Jean-Marie Le Pen, explica el ex diplomático francés.
"Su retórica era de rechazo de los otros, o sea, una forma de racismo y xenofobia, en particular hacia quienes venían del norte de África y de África en general, aquellos migrantes que llegaron a reconstruir Francia después de la Segunda Guerra Mundial. Era también antisemita. Le Pen creó una forma de nacionalismo que se expresaba a través del rechazo de los otros", subraya.
La cima de la carrera de Jean-Marie Le Pen fue cuando disputó la presidencia con Chirac en 2002, si bien fue derrotado ampliamente por el expresidente de derecha. La extrema derecha que dirige su hija Marine Le Pen ha cambiado mucho respecto a la versión del padre.
"Hoy tenemos una extrema derecha radical diferente, que se expresa más en una forma de antieuropeísmo y que sigue siendo muy opuesta a la inmigración. Es una extrema derecha que piensa que el país tiene que replegarse sobre sí mismo para evitar los problemas del mundo. Yo creo que es una visión errónea. Sin embargo, en una Francia un poco más vieja, un poco más asustada frente a un mundo más violento que antes, muchos ciudadanos piensan que es la manera adecuada de reaccionar ante esto. Y no somos los únicos. Vemos cómo, en Alemania, en Italia y en muchos países europeos, está emergiendo esa forma de populismo radical, así como en Estados Unidos también".
Con la visita inédita Damasco de los cancilleres de Francia y Alemania, el nuevo poder de facto en Siria cierra una semana de intensa actividad diplomática en la que estrechó de manera oficial los vínculos con Arabia Saudita, pero también dejó claro que mantendrá relaciones con Irán y Rusia.
Atrapada en medio de las tensiones entre Israel e Irán, con la dramática situacion de Gaza al frente y bajo la presión de Turquía por tener en casa a los kurdos apoyados por Estados Unidos, la Siria post Assad le apuesta a la neutralidad en política exterior.
Entrevistado por Radio Francia Internacional, Ignacio Gutiérrez de Terán, profesor de Estudios Árabes e Islámicos de la Universidad Autónoma de Madrid, analiza la postura regional que defiende la coalición rebelde liderada por el grupo islamista Hayat Tahrar Al Sam (HTS) en el gobierno de Damasco desde hace un mes.
RFI: ¿Cuál es la estrategia que subyace al discurso de neutralidad promovido por el líder rebelde Ahmed al Sharaa y quien dirige a Siria tras derrocar a Bashar al Assad?
Ignacio Gutiérrez de Terán: No se puede entender la nueva relación de Arabia Saudíta con Siria sin tener en cuenta el marco geoestratégico y, sobre todo, la postura de Estados Unidos. Desde el primer momento, Washington ha mostrado una actitud conciliadora y de expectativas que llevóֶ a sus aliados en la zona, empezando por Arabia Saudí, a superar en principio algunas de sus primeras objeciones, entre ellas el supuesto nivel de relación que podría haber entre estos nuevos grupos que dirigen Siria y la formación de los Hermanos Musulmanes que, como se sabe, es archienemiga de Arabia Saudí. La coalición que gobierna a Siria, por definición, no es miembro de los Hermanos Musulmanes. Pero existía ese temor.
Creo que Arabia Saudí ha superado su postura inicial y quiere mantener a Siria fuera del eje de apoyo a Irán. Desde el punto de vista estadounidense, también interesa evitar cualquier tipo de acercamiento de Siria hacia Irán. Es muy habitual en la política regional, cuando hay un cambio de equilibrios en las alianzas, intentar atraer al nuevo elemento hacia una alianza más proclive a los intereses saudíes.
Con Dios y con el diablo
RFI: La prevención y la acción de Riad no evitó, sin embargo, que Ahmed al Sharaa dijera -justamente frente a la cadena saudí Al Arabiya- que Siria no puede dejar de tener relaciones con Irán porque es un país muy importante en la región. ¿Hasta dónde puede el nuevo poder sirio lestar con dios y con el diablo, sea cualquiera de los dos, el dios y el diablo?
Ignacio Gutiérrez de Terán: Claro, eso es lo difícil de diferenciar. En realidad, lo que quiere Ahmed al Sharaa es evitar cualquier tipo de enfrentamiento directo, tanto con potencias regionales como internacionales. Recordemos que los dos pilares básicos del régimen de los Asad hasta diciembre pasado eran Rusia e Irán. Y de una forma inteligente, Sharaa ha tratado de dar a entender a ambos -a Teherán y Moscú- que no va contra ellos.
Lo que intenta este nuevo gobierno es dar a entender que Siria no es un problema ni una amenaza para nadie. Han intentado decírselo a los israelíes, se lo han dicho a los estadounidenses, a Turquía, por supuesto. Y quieren hacer lo mismo con Irán y con Rusia.
El problema, como usted bien dice, es que hay muchos intereses contrapuestos y entrelazados y no sabemos muy bien hasta qué punto esta visión de neutralidad positiva de Siria se podrá mantener teniendo en cuenta la situación dramática en Gaza y la continua tensión entre Israel e Irán. Y Siria está precisamente en medio de los dos. Es un equilibrio muy difícil, pero desde luego van por esa línea y veremos cuánto tiempo dura.
La espina kurda
RFI: Supongo cada uno de los actores regionales, de acuerdo a sus intereses, pedirá la no neutralidad de Siria en el momento actual.
Ignacio Gutiérrez de Terán: Creo que Estados Unidos Rusia y Turquía y, sobre todo, Irán - que es la parte que más ha salido perdiendo con este cambio de gobierno- pedirán que no haya ninguna tendencia de Damasco hacia un lado u otro.
El primer gran expediente que ha de resolver ahora es la cuestión kurda por lo que corresponde a Turquía. Esa será la primera gran prueba porque los turcos parecen decididos a acabar con una presencia militar robusta en el bando kurdo y con la dependencia supuesta, según Ankara, que tienen los rebeldes kurdos o la entidad autónoma de Rojava con respecto al PKK y los que Turquía considera secesionistas kurdos en sus regiones. El gran problema aquí es que las fuerzas de defensa kurdas y las milicias kurdas tienen un apoyo directo de parte de Estados Unidos, condicionado a la lucha contra los grupos radicales islamistas.
RFI: En ese sentido, Ahmad al Sahara propone que estos rebeldes kurdos del noroeste apoyados por Estados Unidos, se integren al nuevo ejército sirio. ¿Es una jugada inteligente para calmar a Turquía o no?
Ignacio Gutiérrez de Terán: No creo que vaya a tener mucho resultado puesto que las propias milicias kurdas no son muy receptivas a este tipo de propuestas. Habría que ver quién comanda esos batallones, brigadas o divisiones y qué tipo de despliegue tienen. Y esto no está nada claro.
Tampoco creo que Turquía se contente con algo que no sea medidas concretas. Ankara ya ha hablado de que se vayan los representantes de las milicias kurdas turcas y de que no haya ningún tipo de relación con el PKK ni con cualquier otro tipo de formación kurda que opere en Turquía. Y también está intentando evitar que estas milicias se expandan más allá de lo que son enclaves kurdos fácilmente controlables.
Por eso digo que es el gran asunto espinoso, el primero de los varios que tiene que resolver el nuevo gobierno sirio. Y veremos cómo van las negociaciones a tres bandas con Ankara, con Estados Unidos y con las propias milicias kurdas. Desde luego está habiendo combates. Sabemos que hay enfrentamientos en la zona del noreste, entre divisiones armadas partidarias del gobierno y grupos kurdos.
La asociación de taxistas de Londres ha advertido que los taxis negros desaparecerán en 2040, cuando los actuales conductores se jubilen porque no hay conductores jóvenes. Una situación crítica que se debe entre otras cosas a una reglamentación estricta.
En la salida de la estación de trenes de London Bridge, a la izquierda, hay una cola con taxis tradicionales negros de Londres, los “black cabs”, aquellos en los que te sientas del revés. Pero la mayoría de viajeros llega o se va en Uber.
Una de ellas es Fiona, una australiana de 32 años, que acaba de llegar a la estación cargada de maletas para regresar a Australia. Dice que la carrera desde el hotel de Kings Cross donde estaba hasta aquí le costaba 50 libras en taxi y 15 en Uber, y por eso se ha decantado por el Uber.
Un auto caro de comprar
La asociación de taxistas de Londres ha advertido que los taxis negros desaparecerán en 2040, dentro de 16 años, cuando los actuales conductores se jubilen porque no hay conductores jóvenes. Hay una escasez de 14.000 conductores.
En la cola de los taxis, dos taxistas conversan en medio del frío mientras esperan clientes. Se llaman Eddie y Malcolm y ambos pasan de los cincuenta. Les preguntamos por qué nadie quiere ser taxista en Londres hoy en día.
“El problema es que cada 12 años nos obligan a finiquitar el taxi por temas medioambientales”, dice Eddie. “Y uno nuevo cuesta 100.000 libras, es mucho dinero, por esto muchos lo dejan, y porque no es fácil encontrar uno nuevo”, recalca.
Según Malcolm, hay que trabajar “un montón de horas para poder pagarlo”. “Tienes que financiarlo a cinco años y con 60 años te puedes encontrar con una hipoteca de 100.000 libras en la espalda, por esto muchos se buscan otra cosa”, añade Eddie. Y esto aunque el taxi esté en buenas condiciones.
Y un servicio caro para los usuarios
Además, los taxistas tienen que pasar dos ITV y los Uber sólo una. Los permisos, las revisiones, el precio del coche, todo esto incrementa el coste de los “black cabs”.
Dos jóvenes salen de la estación arrastrando maletas con ruedecillas. Explican que los taxis cuestan al menos un 25% más, y no los puedes coger en cualquier lugar. Se suben a un Uber y se van.
Al otro lado se los queda mirando Eddie, tras el cristal, aún con el coche vacío, preguntándose hasta cuándo podrá seguir conduciendo un taxi.
Antonio Marshall, de 41 años, corre maratones vestido como el famoso personaje interpretado por Tom Hanks en la película.
De la corresponsal de RFI en Santiago de Chile, Naïla Derroisné.
Todo empezó durante la pandemia del Covid. Mientras teletrabajaba en su casa, Antonio Marshall dejó crecer su barba y su pelo. Un día salió a correr y un vecino le dijo que se parecía a “este famoso personaje de película que corre sin parar”.
Desde entonces, Antonio Marshall se presenta en sus redes sociales como el “Forrest Gump chileno”. Este maratonista de 41 años que vive en Santiago de Chile corre vestido exactamente igual que el famoso personaje interpretado por Tom Hanks.
"Cuando se anunció que volvía la maratón de Santiago, me dije 'oye, este señor me dio una idea', que es correr la maratón disfrazado de Forrest", ha contado a RFI, durante su última carrera del año, el día 22 de diciembre.
Marshall compró en internet la gorra de Bubba Gump, una camiseta amarilla y un short rojo, igual que el personaje, y salió a correr. Hasta se aprendió de memoria algunas frases de la película y adoptó la forma de correr de Forrest Gump.
"La idea es representar el personaje lo más fielmente posible para que la gente, 30 años después del estreno de la película, sienta que Forrest Gump está, entre comillas, nuevamente con ellos", contó a RFI.
Decenas de personas lo acompañaron en esta última carrera en vísperas de Navidad.
Antonio Marshall, que también era muy tímido y lo pasaba mal en el colegio, aprovecha esta visibilidad para enviar mensajes de respeto y tolerancia. "Yo creo que lo normal es ser diferente. Hay que tolerar, respetar las diferencias, valorarlas. Porque cada diferencia, cada individualidad, tiene un potencial".
Roma celebra cada 25 años el jubileo o año jubilar. Un momento extraordinario para la Iglesia católica que comienza el 24 de diciembre a las 19 horas de Roma con la apertura de la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro y una frase del Papa que se repite en el mismo ritual desde el siglo XV. Aunque es un momento de celebración para los católicos, para la ciudad de Roma, que debe gestionar 30 millones de turistas y cientos de obras de mejora en la ciudad, es un gran desafío.
Roma se prepara para el inicio del Jubileo o año santo, con una mezcla de resignación y esperanza. Resignación por el caos que desde hace un año han causado más de 300 obras para mejorar la ciudad.
La esperanza es que estos trabajos, que van desde cuestiones cosméticas como la limpieza de la Fontana de Trevi a obras estructurales para soterrar vías rápidas, saquen a la Ciudad Eterna del anquilosamiento en el que lleva sumida hace décadas.
“No todos creen que las cosas irán a mejor pese a la inyección de casi 4.300 millones de euros que ha recibido la ciudad”, cuenta a RFI Sabina, una romana de 40 años.
“Unas 70 obras quedarán completadas antes de final de año, pero muchos creen que las más complejas demorarán mucho más en ser realizadas”, por ejemplo, la nueva estación de metro frente al Coliseo, donde estos días los grupos de turistas deben esquivar los camiones cargados con cemento.
Reconciliar a los romanos con las autoridades
El alcalde progresista de Roma, Roberto Gualtieri, se juega su crédito político en la gestión del Jubileo. Una tarea nada baladí en una ciudad donde la infiltración de los grupos mafiosos es común en los concursos públicos.
Otra complejidad será gestionar los millones de turistas que se esperan. Gualtieri asegura que, al final, todo irá bien: “Agradezco a los romanos la paciencia. Luego cuando las obras acaban queda la satisfacción de los ciudadanos, que dicen ‘¡qué bello, ha valido la pena!’ Precisamente los mismos que se quejaban de los inconvenientes de las obras, luego creen que vale la pena para tener calles mayores, más bellas, espaciosas y verdes. Este es el espíritu que vive hoy la ciudad”.
Solo el tiempo dirá si el Año Santo reconcilia a los romanos con los gestores de su ciudad o, por el contrario, en una nueva oportunidad perdida para que Roma logre el desarrollo de otras megaurbes como Pekín, París o Nueva York.
Dos semanas después de la caída del régimen de Bashar al Assad en Siria, siguen llegando delegaciones extranjeras a Damasco. El domingo el líder del gobierno de transición, Ahmad al-Charah, recibió al embajador turco que estimó que no hay lugar para los kurdos en Siria en la nueva organización política del país. RFI entrevistó a un médico kurdo residente en España para conocer su opinión.
Mientras muchos celebran desde hace dos semanas la caída del régimen sirio, minorías, como los Kurdos, esperan con incertidumbre los primeros pasos de este nuevo gobierno de transición. Los kurdos han sido invisibilidades por el régimen de Bashar-al-Assad, han estado en primera línea junto a la coalición internacional contra el Estado Islámico y desde hace décadas mantienen un conflicto con la vecina Turquía. Una situación compleja, que hace que su destino sea tan incierto.
Mustafa Abdi, médico kurdo de origen sirio, que llegó a España hace 50 años, confía en que la unidad del país forme parte del futuro programa: “Está con buenas promesas. Nosotros lo que queremos es que estas promesas las cumplan con todo el pueblo sirio. Qué termine la guerra y qué este gobierno tiene que estar vigilado por todas las potencias internacionales, por Francia, por Inglaterra, por la Unión Europea, por América. Para que cumpla con el derecho de todos los pueblos. Tanto árabes, como kurdos, como sirios, con el derecho de las religiones”.
Aunque el propio gobierno provisional promete respetar la diversidad de los pueblos que habitan su territorio, no ocurre lo mismo con su país vecino, que se ha apresurado a aclarar su postura sobre los kurdos que viven en su frontera.
“Ahora mismo Turquía es la primera amenaza, sobre todo para los kurdos de Siria” asegura el médico Mustafa Abdi. “Nosotros estamos dispuestos a dialogar con Turquía. Los kurdos nunca han atacado a Turquía, si tienen miedo, estamos dispuestos a hablar con Turquía, a través de mediación de Estados Unidos o de Europa. Podemos hacer incluso una zona cerca de la frontera con Turquía, desmilitarizada, es lo que ha dicho Mazloum, el Comandante general de las Fuerzas Democráticas Sirias”.
Por el momento todo indica que la vía diplomática podría servir para imaginar un nuevo Estado. Muchos sirios recuerdan el país antes de la guerra, algunos imaginan poder volver a casa, otros sueñan con un país fuerte en la región donde se pueda vivir en paz, enfatiza Abdi.
“Queremos que este país se abra al mundo, que no esté amenazado ni por Turquía, ni por Irán, ni por todos estos milicianos islamistas. Han acabado con un pueblo de 23 millones de personas y con una cultura milenaria. Esto tiene que volver otra vez. El pueblo sirio es un pueblo inteligente”.
En los últimos días, varias delegaciones han viajado a Damasco para reunirse con el nuevo líder sirio. Las relaciones en la región van tomando forma poco a poco.
Leer tambiénLos kurdos de Siria tienden la mano al nuevo poder pero temen por su autonomía
Después de décadas de dictadura, los sirios se animan a ejercer su derecho a expresarse libremente. Este jueves, en el centro de Damasco, decenas de ellos manifestaron y enviaron un mensaje al nuevo gobierno de transición, liderado por el grupo Hayat Tahrir al Sham (HTS): la revolución no ha terminado. Dicen que no descansaran hasta que la nueva constitución reconozca la multiculturidad, pluralidad religiosa y diversidad política de los sirios. En síntesis, piden un país secular.
Con Catalina Gómez y Oriane Verdier desde Damasco
El slogan es claro: "secular, secular, secular". Lo gritan miles de personas que se han reunido este jueves en la tarde Frente a la Opera de Damasco como lo cuenta la activista Sana Ali Mustafá, que ha regresado Siria después de años en el exilio.
“He venido a la plaza de los omeyas para expresar nuestra petición por un país que represente a todos los sirios, por un país que sea realmente unido, por un país donde nuestro nuevo gobierno temporal y las autoridades entiendan que nuestra revolución nunca terminará, a menos que nuestra constitución y las autoridades representen a toda la gente de siria”, dice a RFI.
El nuevo gobierno de transición liderado por Hayat Tahrir Al sham representa nuevos retos para los sirios que han sido testigos de cómo han gobernado estos años en la provincia de Idlib, donde imperan las normas de comportamiento islámico. Por eso quienes están aquí piden por país secular como cuenta la actriz y activista Aroub Al Masri
“La revolución está comenzando ahora. La cara previa fue una pre revolución. La gente ahora está aprendiendo cómo vivir una vida política que no existía en Siria. La población ha aprendido por las malas. Y después de la Revolución será el nacimiento de la nueva siria con esta gente aprendiendo cómo vivir sus vidas”, asegura.
Otros, como Sana Warhou se apersonaron para a defender sus derechos. “Son tiempos de incertidumbre. Las últimas declaraciones de las autoridades eran vagas sobre el papel de las mujeres en la reconstrucción. Hemos venido aquí para reiterar la importancia de darle poder a las mujeres”, afirma.
Un poco alejados de la multitud, Abdel Hafez Chelbak y sus hijas comparten la alegría de los manifestantes, pero no sus exigencias de un gobierno laico. “Creo que el Islam puede garantizar los derechos y la libertad de todos los seres humanos. El propio profeta Mahoma dijo que todo el mundo debe ser respetado y libre de expresarse”, afirma.
A los sirios se les ha pedido paciencia con este gobierno de transición que apenas empieza. Pero un sector de la sociedad no está dispuesto a aceptar un modelo diferente al democrático que respete sus libertades e incluya la diversidad del país.
Your feedback is valuable to us. Should you encounter any bugs, glitches, lack of functionality or other problems, please email us on [email protected] or join Moon.FM Telegram Group where you can talk directly to the dev team who are happy to answer any queries.